Consejos para comprar una estufa de leña

El disfrute de una estufa de leña se puede sentir en toda la casa. El calor radiante procedente del fuego perfectamente asegurado es una de las fuentes de calor más fiables y eficaces del planeta. Si la calefacción central u otras soluciones de calefacción le han decepcionado, una estufa de leña puede ser la opción ideal para su hogar.

La compra de una estufa de leña añade valor a su vida y a su hogar, pero vale la pena informarse un poco antes de dirigirse a su distribuidor local de estufas de leña. Esto es lo que necesita saber en la guía perfecta para comprar una estufa de leña.

Tamaño

Una de las primeras cosas que hay que tener en cuenta a la hora de comprar una estufa de leña es el tamaño necesario. Una casa media puede calentarse notablemente con una unidad más pequeña. Las casas más grandes requerirán unidades más grandes o incluso múltiples unidades dependiendo de la disposición.

También hay que tener en cuenta qué parte de la casa se quiere calentar. Aunque la mayoría de los propietarios querrán calentar toda la casa, algunos prefieren utilizar una unidad pequeña para una o dos habitaciones. En las casas más antiguas con corrientes de aire, esto suele ser lo ideal, ya que los sistemas de calefacción modernos no siempre calientan adecuadamente las habitaciones periféricas.

Antes de acudir a su distribuidor de estufas de leña, asegúrese de conocer el tamaño e incluso la antigüedad de la vivienda. Este conocimiento puede ayudar mejor a su equipo a encontrar las opciones adecuadas para su situación.

Acceso a la madera

Aunque las estufas de leña no son tan sencillas como ajustar la temperatura en una unidad eléctrica, a los propietarios no parece importarles el hecho de tener que mantener el fuego. Sin embargo, los propietarios deben considerar sus opciones de acceso a la leña. Los propietarios de terrenos pueden simplemente cortar un suministro fresco de madera cuando lo necesiten, pero los que viven en la ciudad pueden tener que encontrar un proveedor de madera.

Con la creciente demanda de estufas de leña, cada vez son más las empresas que hacen caso al acceso a la leña. A día de hoy, son pocos los lugares que no disponen de acceso a la madera por parte de empresas que sustituyen continuamente los árboles talados para el suministro. Esto significa que siempre hay nuevos árboles que crecen, lo que hace que la madera sea la solución ideal para las necesidades de calefacción de cualquier propietario.

Necesidades del conducto de humos

Todas las estufas de leña requieren dos ingredientes principales. El primero es el aire fresco traído desde el exterior que crea una corriente de aire para proporcionar el oxígeno necesario para la unidad. Esto alimenta la llama y permite que arda de forma brillante y caliente con una gran llama. La llama se controla abriendo o cerrando los orificios de alimentación para amortiguar o aumentar la llama. El cierre de los orificios amortigua la llama ofreciendo una temperatura más baja cuando se requiere.

La segunda necesidad principal de una estufa de leña es permitir que el exceso de calor salga por el conducto de humos. Las casas antiguas pueden tener una chimenea existente que se puede equipar con una nueva estufa para aumentar la eficiencia. Simplemente se coloca un tubo a través del conducto de humos existente.

Incluso si la casa no tiene un conducto de humos existente, el propietario puede utilizar una estufa de leña. Un instalador de estufas de leña puede recomendar dónde colocar el conducto de humos y cómo debe ventilar la unidad. (klonopin) Puede recomendar la ventilación a través de la parte superior de la casa, pero el conducto de humos también puede instalarse en el lateral de la casa.

Almacenamiento de leña

La eficiencia de una estufa de leña se ve incrementada por el hecho de que se puede almacenar mucha leña para utilizarla durante los meses más fríos. El almacenamiento adecuado de la madera es siempre esencial y debe considerarse antes de comprar una unidad. Tanto si el propietario de la casa tiene la intención de cortar su propia madera como de comprar madera cortada de un recurso externo, la madera debe mantenerse seca.

Para el leñador, no sólo se necesita un lugar amplio para almacenar la madera curada, sino también la que se está curando. Un almacenamiento adecuado en el exterior incluye un área cubierta para mantener la madera seca, así como una plataforma elevada para permitir que la madera respire mientras se almacena. La plataforma sólo tiene que estar a unos 30 cm del suelo, con amplios soportes para soportar el peso de la pila de madera.