España es sin duda una nación amante de los perros. ¿Sabías que en 2021 había alrededor de 450.000 perros como mascotas en España? Estos animales pueden convertirse rápidamente en un miembro más de la familia y participar en actividades y días de paseo. Tanto si conduces con frecuencia a la playa para dar un paseo panorámico con tu perro como si lo llevas a picnics familiares y otras reuniones, es imprescindible que viajes de forma segura mientras tu mascota está en el coche.
A continuación, podrá descubrir cómo viajar con seguridad con un perro para que pueda seguir disfrutando al máximo de sus días de paseo.
¿Puede un pasajero llevar a un perro en el coche?
Cuando se viaja con una mascota, no es seguro que un pasajero la sujete, independientemente del tamaño del perro o de la duración del viaje. Esto se debe a que existe la posibilidad de que se escurra fuera de su alcance y pueda convertirse en una distracción, poniéndole a usted y a los demás pasajeros en peligro. Independientemente de si tienes un perro pequeño, como un chihuahua, o uno grande, como un gran danés, nunca debes dejar un animal suelto en un vehículo. No puede colocarse en el regazo de alguien ni llevarse en brazos de un pasajero.
Cómo atar a un perro en el coche
Hay varias formas de asegurarse de que el perro esté bien sujeto. Por ejemplo, utilizando un arnés o un transportín o instalando un protector metálico.
Con un arnés
Utilizar un arnés es probablemente la opción más fácil y barata. El arnés se puede poner a tu perro y debe pasar por sus patas para que se ajuste a su pecho y cuello. Debe encajar con el broche. Una vez que el arnés esté puesto en tu mascota, utiliza un clip para asegurar el arnés al cinturón de seguridad del coche. Algunos arneses también se enganchan a la ranura del cinturón de seguridad. Es probable que este método sea el más cómodo para tu perro y te permita cierta flexibilidad en cuanto a su colocación (asiento delantero, asiento trasero, etc.).
Los arneses pueden costar unos 10 euros, lo que los convierte en la opción más rentable.
Con el arnés puesto, el perro no debería poder alcanzar al conductor. Si puede hacerlo, habrá que acortar la correa que conecta el arnés con el cinturón de seguridad, o mover al perro a otra posición. Sin embargo, la correa debe ser lo suficientemente larga como para permitirle algún movimiento, como estar de pie, sentado o tumbado.
Con un transportín y rejilla
Para las razas pequeñas, un transportín y rejilla separadora perros coche puede ser una buena idea. Por lo general, la gente asocia los transportines con los gatos, pero también pueden ser estupendos para transportar perros pequeños, como pomerania, yorkshire terrier o perro salchicha. Sin embargo, es posible que su mascota tarde en acostumbrarse a este método. El transportín debe ser del tamaño adecuado para el perro y deberá estar sujeto con un cinturón de seguridad. La mayoría de los transportines tienen un asa en la parte superior y el cinturón de seguridad puede introducirse a través de ella y engancharse.
Es posible que su perro necesite un poco de adiestramiento en el transportín antes de utilizarlo por primera vez en el coche. Esto puede hacerse en casa, animando al perro a entrar en el transportín y dándole un premio cuando lo haga. Lo que se pretende es evitar que el transportín se convierta en un objeto que le dé miedo. Una vez que se sienta cómodo utilizando el transportín en casa, estará listo para utilizarlo en el coche.
El transportín no debe colocarse en el maletero de un coche de turismo, ya que la circulación de aire en esta zona está restringida y tu mascota puede no recibir suficiente oxígeno. Tampoco debes dejar el transportín sin asegurar en ninguna zona del coche. En caso de accidente, el transportín puede salir despedido y herir a los pasajeros. El asiento delantero o trasero es el mejor lugar para colocarlo. .